martes, 4 de julio de 2017

Vicios confesables


Una de las cosas que más solía echar de menos al salir de vacaciones o en pequeñas escapadas de fin de semana era el no  poder ver una película. Supongo que esto puede sonar ridículo pero les aseguro que lo pasaba mal cambiando de canal en la habitación del hotel hasta altas horas de la madrugada sin nada que echarme a la boca. Eran los tiempos en los que internet estaba en pañales y la posibilidad de un dispositivo portátil para ver cine nos sonaba a ciencia ficción. Luego llegaron esos pequeños dvds con pantalla incorporada pero que costaban una pasta, no me convencían y nunca tuve uno. En cuanto se instalaron las nuevas tecnologías y todos esos increíbles aparatos se pusieron a nuestra disposición la cosa cambio por completo. Ahora cuando salgo fuera siempre me acompaña eso que llamamos tablet, con ella puedo dar rienda suelta a esa imperiosa y quizás absurda necesidad…


2 comentarios:

  1. Hola Fran, para mí el mejor final y la mejor frase sigue siendo la de Al rojo vivo.
    Saludos, asándome del calor, en días así sí que hecho mucho de menos Canarias pero luego veo a los nietos y se me pasa. :-)

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    Respuestas
    1. Que tal Lola!
      Ese final con Cagney en lo alto del deposito es de mis preferidos, siempre he tenido predilección por ese actor. Es una película que vuelvo a ver cada cierto tiempo y me sigue gustando mas y mas.
      Yo lo del calor no lo llevo muy bien, en cuanto pasamos de los 30 ya me agobio. Hoy por ejemplo esta el día raro, algo de lluvia y una sensación de bochorno que no sabes que ropa ponerte. No cabe duda que estar cerca de los tuyos compensa lo del clima...jeje
      Por cierto, el plan para estas vacaciones es visitar Gran Canaria, Carmen ya estuvo en las islas en tres ocasiones yo todavía no las conozco, tengo muchas ganas.
      Gracias por pasar y comentar, bicos:)

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