Una
anciana inmigrante china se ve envuelta en una loca aventura, donde ella sola
puede salvar el mundo explorando otros universos que se conectan con sus vidas
pasadas. (fuente IMDb)
En el festival de Sundance 2016 se produjo un abandono de
buena parte del público que asistía a la proyección de Swiss Army Man (2016), curiosamente The Daniels (así son conocidos estos directores) se llevaron el
premio a la mejor dirección. Unos años más tarde se vuelve a producir esa
deserción por parte de la audiencia, supongo que quienes pasen por taquilla
aguantaran algo más pero en lo que se refiere al visionado en casa no recuerdo
una espantada de tales dimensiones. Me he visto del tirón sus 127 minutos lo
cual ha sido un auténtico suplico. La trama no arranca mal, unos personajes y
una situación que podría haber dado juego se tuerce y nos introduce en la feria
del absurdo. La indiferencia es la tónica general, el aburrimiento lo inunda
todo y la vergüenza ajena asoma la cabeza. Por momentos tengo la sensación de
que se trata de una broma, me froto los ojos y el dinosaurio sigue allí. Creo
sinceramente que esta película es al cine lo que Rodolfo Chikilicuatre a la música.
En lugar del tráiler habitual les dejo un momento que
da idea del nivel del engendro…