domingo, 22 de enero de 2012

Domingos de Brummel


La idea es ir colgando esas canciones que allá por los 70 llenaban las pistas de baile. Temas que hoy seguro que provocan alguna que otra carcajada, ya sea por la estética del grupo, el estilo del video clip o cualquier otra cosa que choca y chirria con la estética y estilo imperantes en esta época que vivimos, pero que en el fondo cuando las escuchas te alegran el alma, ya sea por los buenos recuerdos que te traen, por aquella chica que no te hacia ni puto caso o por lo bien que te sentías debajo de aquellas luces de colores. Alguien podría preguntarse y que tiene que ver esto con el cine, así a primera vista posiblemente casi nada o muy poco, pero si echamos la vista atrás nos damos cuenta de algo –aunque hoy en día el cine por los motivos de sobra conocidos ya no forma parte de la rutina del séptimo día…-, el cine y la discoteca formaban parte de esa dinámica sagrada que eran los domingos. El cine siempre lo asocie al ultimo día de la semana, era ese premio, era el destino que le dabas a gran parte de tu paga semanal. Luego uno se iba haciendo mayor y comenzaba a mostrar interés por las chicas –en el caso de los heteros…-, y allí que se iba uno con los colegas. Te ponías tus mejores galas, le sacabas brillo a los zapatos, te afeitabas y te echabas colonia, yo como otros muchos usaba Brummel…

 
                                                   Había a quien se le iba la mano con ella…
 
 
Para inaugurar esta sección contamos con una invitada de lujo como es Dona Summer, además de que el tema en cuestión aparecía en una película. La canción es Last Dance y sonaba en Thank God It’s Friday (1978).





2 comentarios:

  1. Qué bueno. ¿Como era? En las distancias cortas, es donde un hombre se la juega, o algo así.
    Lo que siempre me hizo mucha gracia de esos domingos de disco eran los gilipollas que en invierno subían a la nieve por la mañana y luego por la tarde iban a la discoteca sin cambiarse pa fardar, y se metían en ese local abarrotado, a unos 40ºC, con plumífero, gorro y botas de descanso. Más de uno estuvo al borde de una lipotimia, jajaja.
    Un saludo

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  2. Si que era algo parecido el slogan, con una chica en un ascensor recuerdo...jeje Es asombroso lo gilipollas que podemos llegar a ser los tios a la hora de ligar o intentar asombrar...jajaja Muy bueno el personaje que describes.
    Un saludo Xurde y gracias por pasar!

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