Un buen arranque, una
historia dura sin penas esperanzas y cruda hasta el último fotograma. Podrá
gustar más o menos pero desde luego no te deja indiferente. Incomoda como una
piedra en el zapato y real como la vida misma. Creo que es una buena y muy
recomendable película.
Este es el tipo de película
que nos hace albergar un halo de esperanza. No todo está perdido. Hay vida más allá
de sagas, superhéroes y demás formulas. En cuestión de unos días me la he visto
dos veces. Ya en 1993 la directora neozelandesa dio buena muestra de su oficio
con The Piano, esta vez vuele a
dejarnos una pieza del mejor cine, de ese que tanto echamos de menos. A falta
de alguna sorpresa que nos pueda deparar lo que queda de diciembre creo que esto ha
sido con diferencia lo mejor de este 2021.
El 5 de octubre de 1804
se hundía la fragata y la valiosa carga que transportaba. En 2007 los caza
tesoros de Odyssey localizaban los
restos y comenzaban las operaciones para subir a superficie el tesoro sumergido.
Amenábar en su mini serie La Fortuna recoge
la posterior batalla legal entre las autoridades españolas que reclamaban la
carga y la empresa estadounidense. Si bien no he visto todavía la serie aquí les
dejo un muy recomendable programa en el que se narran las circunstancias y los
hechos tal y como se produjeron en aquel 1804 así como el proceso de pleitos
posteriores. Si les interesa el tema no se lo pierdan, el relato y la extraordinaria
producción son realmente magníficos y su escucha resulta de lo más placentera y
entretenida.
Con algunas dudas y
demasiados reparos me plante ante ella, a los pocos minutos se habían esfumado
y caí rendido a sus pies. Fotograma a fotograma los recuerdos afloraban en
cadena, objetos, situaciones, pequeños detalles, lugares…
Una película entretenida,
dirigida con buen pulso y que desde luego me ha provocado emociones varias. Un
reparto muy acertado y con unas interpretaciones que me resultan creíbles, capítulo
aparte lo de Begoña Vargas, desconocía a esta actriz y me ha dejado impactado.
Es el corazón de la trama, la clave del todo, la mirada por la cual saltas al vacío
y ese amor al que nunca olvidaras. Afirmaba en su crítica Ricardclássics de cinemala imposibilidad de no enamorarse de ella
y es cierto. A riesgo de sonar exagerado les diré que no recuerdo a ninguna
actriz que me provocase tal impacto emocional.
Son inevitables las
comparaciones con las películas de Eloy de la Iglesia o Carlos Saura, tenían verosimilitudy venían a ser auténticos documentos
sociales. La cita de Daniel Monzón aporta otras cosas, más medios y mejor
factura. Tengo en el altar la escena final de “Deprisa, deprisa” (1981), no diré que hago apostasía de Berta
Socuéllanos y su Angela, pero la
irrupción de Tere me provoca tener el
corazón dividido. El plano final con la canción de Lin Cortes me dejo en un
estado que pocas veces ha logrado una película.
Calabria, la punta de
la bota, el odio y el rencor se transmite generación tras generación, 3
hermanos…
Una película dura,
oscura y amarga. Con los clichés propios del genero la trama nos sitúa en Africo, un municipio en la provincia de Reggio Calabria (gran parte de los diálogos
son en calabrese) donde también rigen
las leyes de los más fuertes. El magnífico reparto y la atmosfera juegan un
papel importante. La historia recurre a los tópicos y aun así absorbe e
impresiona. Muy recomendable.
Les dejo el mismo tráiler
en versión original y doblada. Entiendo que leer los subtítulos no resulta
comodo (es cuestión de acostumbrarse…) pero creo que salta a la vista (en este
caso al oído) la gran diferencia entre la voz prestada (lo sé, tenemos unos
maravillosos profesionales del doblaje…) y la de verdad. ¿Ustedes se imaginan a
Catinflas doblado? Yo tampoco.
Para todo existe un término
en inglés, al visionado compulsivo de series (que digo yo que también se podría
aplicar al cine…) se le dice binge-watching,
binge-viewing o marathon-viewing, pues eso, que la madrugada pasada disfrute de lo
lindo con los 6 episodios de esta estupenda y muy recomendable serie. Es un
coctél que creo gustara a público muy diverso, por un lado el entorno en donde
se desarrolla gran parte de la trama es un submarino nuclear (a mí con esto ya
me tienen a sus pies…), luego esta ese reto que tanto nos gusta como es
adivinar quién es el asesino (whodunit que
dirían los del Brexit, es decir, que
quien lo ha hecho…), a eso añadamos unas más que difíciles condiciones para
llevar a cabo una labor de investigación. El resultado es una buena muestra de thriller en formato serie y que desde
luego la incluyo entre las mejores de este 2021.
Un secuestro y su
rescate correspondiente, una disyuntiva a vida o muerte y una investigación con
dos objetivos.
Estamos ante una de las
películas más occidentales del gran maestro japonés. Una historia común con dos
partes bien diferenciadas en las que el metraje a pesar de sus dos horas largas
no resulta pesado, todo lo contrario. Posiblemente una de las investigaciones más
exhaustivas y pormenorizadas que jamás he visto en pantalla. No sé si el
termino obra maestra ya resulta muy
manido (admito que lo uso con frecuencia…), en todo caso aquí se le queda
pequeño.
Tal día como hoy de
1989 se iniciaba el derribo del muro de Berlín,
ese al que las autoridades de la RDA
llamaban Antifaschistischer Schutzwall (muro
de protección antifascista), el mismo en el que muchas personas se dejaron
la vida tratando de cruzar al otro lado. Aprovechando la efeméride recordamos
esta estupenda película que aborda el asunto con una historia de por medio muy
curiosa.