Al apenas recién
elegido presidente de Argentina Hernán
Blanco (Ricardo Darín) se le presenta una difícil papeleta. Deberá asistir a
una cumbre de países latinoamericanos que se celebrara en la cordillera de los
Andes, allí deberá resolver aspectos complicados y soportar ciertas presiones
internacionales, al mismo tiempo tendrá que hacer frente a una más que
complicada situación familiar que podría poner en peligro su futuro político.
Un alejado lugar para
tomar importantes decisiones (foto: imdb)
Como decía Montesquieu:
‘La corrupción raras veces comienza por
el pueblo’ (foto: imdb)
Al gran Ricardo Darín
te lo crees en cualquier papel (foto: imdb)
Interesante galería de
personajes (foto: imdb)
Momento para sincerarse
(foto: imdb)
Vaya por delante que mi
admiración por Ricardo Darín posiblemente provoque que esta pequeña crítica no
sea objetiva. Creo que estamos ante uno de los mejores actores a nivel
internacional, da igual lo que le pongan por delante, cualquier interpretación
la saca con nota dotando al personaje de ese su particular encanto. En cuanto a
la historia, desde el minuto 1 me he quedado pegado a la pantalla, buenas
interpretaciones (excelente alguno de los mandatarios), un guión que nos
muestra los entresijos de lo que debe de ser una reunión de tal calibre y sus
casi dos horas de metraje que se me pasaron volando. Por ponerle un pequeño pero, quizás ha sido el final lo que me
dejo un poco descolocado. Mejor no desvelemos más…