El terrible suceso de
hoy en Paris desatara una oleada de reacciones, condenas y muchas horas de
tertulias con opiniones varias. A los que sostienen la idea de ciertas amenazas
fundamentalistas ya no se les mirara como a conspiranoicos y posiblemente los
libros de Michel Houellebecq (polémico autor acusado de islamofobo)
incrementaran sus ventas en más de un lugar. Como ya comente en alguna otra
ocasión respeto las creencias de otras culturas pero no acepto que pretendan imponernos
al resto sus dictados y doctrinas del medievo. Lo de esta gente es diferente,
como muchas otras religiones juegan con el miedo, pero esta vez no son amenazas
de un fuego eterno, es un terror real, del que te sopla en la nuca. Es posible
que este macabro atentado logre su objetivo, que no es otro que expandir el
miedo y que nadie ose publicar un dibujo o caricatura del profeta Mahoma, cosa
que al parecer no figura en el Corán sino que son unos textos islámicos los que
advierten sobre esta prohibición. Ya en alguna ocasión se han vivido episodios
de amenazas y atentados. Uno de los que alzo su voz contra estos
fundamentalismos fue Theo Van Gogh, el cineasta holandés siempre se había mostrado
crítico con todo tipo de religiones y no eran pocas las amenazas que recibía.
En 2004 vio la luz el cortometraje Submission que hacia hincapié en el papel de
la mujer en las sociedades islamistas así como en la violencia que se ejerce
contra ellas. Eso le costó la muerte ese mismo año, acribillado a tiros,
apuñalado y degollado en plena calle. Me temo que lo sucedido hoy provoque más
miedo que solidaridad con el medio francés, los editores y responsables de
contenidos se lo pensaran dos veces antes de publicar o emitir cualquier cosa que
desate las iras de estos descerebrados. Al escribir esto me estaba acordando de
los estériles intentos de que la película sobre el fulano coreano no viera la
luz, al principio la amenaza surgió efecto, pero luego ante la vergüenza de hincar
la rodilla decidieron tirar para adelante. En realidad aquello no paso de una
bravuconada aderezada de algunos correos electrónicos y alguna peli que se subió
a la red con mucha antelación. Esto es
diferente, esto es la muerte y el terror en vivo y en directo.
la irracionalidad cada día más se viste de muerte.....en que mundo vivimos???
ResponderEliminarBesos
La verdad que la cosa es para preocuparse. Si ya nos quitan la libertad a ver que nos queda. El tema es muy serio.
EliminarBicos.
Hola Fran, esa gente es fanática y con el fanatismo no se puede dialogar. Tú eres más joven que yo y posiblemente no te acuerdes, pero en los comienzos de la democracia en España también tuvimos nuestro Charlie Hebdo, con el atentado a la revista El Papus, dónde murió una persona, y a partir de ahí la chispa de la revista fue languideciendo hasta que desapareció. Aquello fue cosa de la Triple A creo que se llamaba, pero el fin era el mismo que estos de ahora: sembrar el terror.
ResponderEliminarSaludos,
Que tal Lola,
ResponderEliminarSi que recuerdo vagamente lo del atentado a El Papus, he buscado en la web y tuvo lugar un 20 de septiembre de 1977, por aquel entonces yo tenia casi 10 años. Lo que si recuerdo es hojear algún ejemplar de la revista, solían pasar de mano en mano. La sátira y la critica suele fomentar enemistades, de cualquier color, en un bando o en otro. Todo lo sucedido en las ultimas horas nos muestra la magnitud del asunto y su gravedad. Ayer intercambien precisamente unos correos con un amigo que esta en Paris visitando a su familia, me describía aquello como una situación angustiosa y de pesadilla. Deseo y espero que esto sea un episodio aislado, pero no las tengo todas conmigo...
Que pases un buen fin de semana.