Al principio me daba
por satisfecho por estar en la última fila y no tener a nadie detrás, lo de los
golpecillos con los pies en mi respaldo era una cosa que me ponía de los
nervios. Ahora ya no me llega con eso, necesito no tener a nadie a mí
alrededor, exceptuando la persona que me acompaña. Es por eso que cuando llego
a la taquilla y le solicito una butaca sin nadie a izquierda, derecha, detrás o
adelante me suelen mirar con cierta extrañeza. Sé que esto puede derivar en una
fobia algo más seria, pero bueno, cada uno tiene sus manías…
Es que hay gente que debería quedarse en casa y no incordiar en las salas de cine. Me molesta muchísimo el murmullo, las conversaciones y comentarios; más que los golpecitos. Y ni te cuento lo de los móviles….
ResponderEliminarA pesar de lo terribles que son las salas, me gustan los Multicines Norte, por su programación y por la no numeración de los asientos. Eso te da mucha libertad, jijiji
Que tal LU!
EliminarÚltimamente hay una nueva categoría de incordio. Superada la odiosa irrupción de las llamadas de los teléfonos en mitad de la película ahora sucede que hay gente que por no se que necesidad se ponen a consultar el móvil y con esos pedazo/pantallas iluminan una buena zona a su alrededor, esto me paso no hace mucho con alguien que tenia a mi lado, a la segunda vez me levante y me fui a otra fila.
Hace mucho que no voy a los Norte, creo recordar que sus salas tenian poca inclinación lo cual a veces si te tocaba alguien mas alto delante era un problema. Es cierto que proyectan muy buenas pelis. Nunca olvidare hace un montonazo de años cuando fuimos toda la pandilla a ver The Wall, fue toda una experiencia
Por cierto, al final quedo una mañana estupenda (fallaron bastante los pronósticos...) y aunque las olas no fueron todo lo bueno que deseabamos si que pase un buen rato con un par de amiguetes en el agua.
Venga, feliz semana.
Bicos:)
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