James
Allen (Paul Muni) es un joven que regresa a los Estados Unidos después de haber
participado en la Primera Guerra Mundial. Como no podía ser de otra forma su estancia en
las trincheras le ha cambiado el carácter, sus ambiciones son otras y no se siente a gusto en su anterior
trabajo, por lo tanto intenta emprender una nueva vida. Un día el destino le
juega una mala pasada y James se encuentra en el lugar menos indicado y en el
momento menos oportuno. Un maldito malentendido y unas leyes terriblemente
severas e injustas harán que James sea enviado a prisión. A partir de aquí su
vida cambiara para siempre.
Aquellos maravillosos títulos de credito
Ni me mires...
Fue
gracias a Lola Santana (bisuteriaycine.blogspot) que comentando esta película me
llevo a descubrirla, a ella le dedico esta entrada.
Me
la he visto dos veces en cuestión de una semana. Cualquier adjetivo que le
dedique se va a quedar corto. No cabe duda de que estamos ante una grandísima y
quizás algo desconocida película, al menos no es un título que suela figurar en
esas listas tan manidas. De entrada al comienzo se nos presentan a los
personajes al modo clásico, no sobra absolutamente ni un fotograma, economía narrativa,
sin virguerías pero con una claridad que hasta el más simple de los mortales
notara como le llega a lo más dentro.
Escena con alto contenido sexual
Si
no recuerdo mal en ese lejano 1932 la censura en Hollywood todavía no pintaba
mucho. En producciones de esa fecha eran evidentes las connotaciones sexuales,
dobles sentidos y alguna que otra crítica al sistema. En esta cinta por ejemplo
se nos muestran las inhumanas condiciones en las que cientos de hombres pasaban el
resto de sus vidas.
Una vida encadenado
Una
película de visión obligada sin lugar a dudas y como decía la buena de Lola,
una frase final para la eternidad…
Hola Fran, buscando unas cosas en internet me acabo de encontrar esta entrada que me habías dedicado, ¡muchísimas gracias! y me alegro que te haya entusiasmado la película, es un obra de arte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Lola!
EliminarPues yo estaba buscando esta entrada y acabo de leerte. Es una joya.
Besos!